jueves, 29 de julio de 2010

Boda Liliana Rodríguez Méndez y Fernando Martínez Ruesga









Julio 24, 2010
San Cristóbal de las Casas, Chiapas.



San Cristóbal de las Casas, la ciudad más cosmopolita de nuestro bello estado fue el escenario seleccionado por Liliana y Fernando para unir sus vidas para siempre y citar a sus familiares y amigos que viniendo de fuera del estado, estaban seguros que quedarían maravillados al conocer esta bella ciudad.

La cita se acordó a las 10:30 hrs en el hotel donde se hospedó gran parte de la familia y en donde la novia estaba siendo maquillada y peinada,  no permitió que nadie la viera hasta que terminara su arreglo personal.

Mientras la terminaban de arreglar, me di a la tarea de conocer el hotel, que aunque pequeño, tenía escenarios excelentes para realizar buenas fotografías, sólo necesitaba que Liliana estuviera lista para comenzar a tomarlas.

Por fin vi que Liliana había salido de su habitación, fue el momento de comenzar  con las fotografías, iniciamos con los últimos retoques de su arreglo aprovechando una hermosa ventana, la acerqué y comencé a aprovechar sus dotes de modelo de la novia. Su mamá, mucho más nerviosa que ella comenzaba a apurarla, pese a que el tiempo era muy conveniente aún.








Aprovechamos una bella terraza, las escaleras y un hermoso piano cerca de la entrada, del cual ya me habían avisado los novios, y aunque en un breve lapso, se cumplió el objetivo.







De ahí salimos rumbo a donde acordamos realizar la sesión de fotografías de los novios. Un lugar hermoso, bellos escenarios, grandes jardines, pero lo que más disfruté fue la actitud de Liliana y Fernando, ella inclusive aportaba mucho para poder hacer más y mejores fotografías, toda una modelo!!! Y por supuesto Fernando no se quedó atrás y fue el acompañante perfecto para mi modelo.




















La familia apuró la sesión de fotos sin poder disfrutar al 100% el lugar, había que llegar temprano a la misa, asi que solo tomamos unas pocas fotos con la familia y nos dirigimos a la iglesia del Carmen.
Cuando llegamos ahí, la gente empezaba a llegar, poco a poco familiares y amigos se acercaban a la iglesia, algunos se quedaban afuera, la mayoría se acomodaba adentro en sus lugares.

Fernando y Liliana hacían su arribo y todo el mundo se acercaba a saludarlos, llenos de sonrisas y buenos deseos se preparaban para entrar.












El cortejo inicio y comenzaba un momento mágico y espiritual, los novios entraron llenos de ilusiones y anhelos, los padres de ambos lucieron sonrientes y orgullosos toda la misa, la cual transcurrió en un excelente ambiente de cordialidad hacia los novios.













Mutuamente se aceptaron intercambiando simbolos de amor eterno.













Al final de la misa caminaron de la mano por el pasillo central festejando su unión.




Afuera el festejo parecía divino, el cielo se iluminaba con los relámpagos de una intensa lluvia llena de granizo que hizo que tuviéramos que esperar por cerca de 40 minutos para poder dirigirnos al salón donde se ofrecería el banquete.



Por fin llegamos al salón, los novios esperaban en la parte superior observando el arribo y acomodo de sus invitados; éste momento lo aproveché para tomar un nuevo photo shoot, éste en los interiores del lugar, que teniendo una iluminación diferente, y nuevamente contando con la actitud de ambos realizamos fotos extraordinarias.
















El momento de entrar al salón llegó y me preparé en la planta baja para recibirlos, hicieron su entrada triunfal al son de la marimba, los invitados los llenaron de aplausos y ovaciones para los recién casados, las damas, ayudaron a lucir más la entrada al aventar a su paso pétalos de rosas.






Ayudado por Erica Cancino, principal dama de honor (y coordinando en varias ocasiones el evento), realizamos una simpática y original sesión de fotos de los novios junto con todas las damas, sesión que iniciamos dentro del salón y terminamos en las hermosas calles de “San Cris”.












De regreso al salón, la ceremonia del brindis ya esperaba, para dicha ceremonia se invitó a los padres tanto de Liliana como los de Fernando, el papá de Fernando tomó la palabra para posteriormente cedérsela al papá de Liliana, ambos les dedicaron palabras de amor y bendiciones para su matrimonio.








Los novios se acercaron a la pista, que sería para ellos solos, bailaron su primera pieza: “Up where we belong” de Joe Cocker, canción que seguramente desde hace un tiempo es muy simbólica para ellos pues la cantaron por completo.






Por fin era tiempo de la gran diversión para todos los invitados, dio comienzo la fiesta con la aventada de ramo para las chicas, Fernando extrajo la liga de Liliana para aventarla a los caballeros y por supuesto el novio voló por los aires a manos de sus familiares y amigos.











Liliana seguía posando para mi lente, pastel, entrevistas, baile y alegría fue el común denominador para ésta hermosa y divertida fiesta.






















La música y la ropa de timbiriche sería el broche de oro para ésta hermosa celebración.






Estoy seguro de que Liliana y Fernando disfrutaron éste inolvidable día.


Felicidades!!!